Un licor sensual y sofisticado con toques de albaricoque confitado y vainilla. La sensación fuerte e intensa de una noche eléctrica en Oriente…
Las mujeres llevan su perfume vespertino, las estelas son atronadoras. Dondequiera que vayas por la noche, sucumbes a este mismo olor hipnótico.
La caricia obsesiva del ámbar y el ante, el aliento aterciopelado de la rosa y el azafrán.